El nuevo plan de urbanización de la Vaguada contempla un vial peatonal de siete metros y un aparcamiento gratuito para 100 vehículos
El proyecto revitalizará un entorno que alberga 13 edificios públicos y 26.000 metros cuadrados de zonas de esparcimiento en un radio de 200 metros
El alcalde califica de
"absurdo" que actualmente los dos viales laterales de la parte
trasera del bloque de edificios no tengan salida
El concejal Pablo Novo
señala que las obras comenzarán en breve y se prolongarán durante un mes
El Ayuntamiento de Zamora ha
dado a conocer el nuevo proyecto de urbanización en La Vaguada, que contempla
la creación de un vial de conexión de los dos laterales de la zona de
edificios, ahora sin salida, y la habilitación de un centenar de plazas de
aparcamiento gratuito. Con un plazo de ejecución de un mes y un coste de 48.000
euros, el alcalde, Francisco Guarido, y el concejal de Obras, Movilidad,
Infraestructuras y Participación Ciudadana, Pablo Novo, presentaron un proyecto
cuyas obras comenzarán en breve, con la pretensión de revitalizar los espacios
públicos que alberga el entorno y desahogar de tráfico el centro de la ciudad.
Esta actuación provocó hace
casi dos años una serie de quejas por parte de algunos vecinos, que reclamaban
al Ayuntamiento el uso exclusivamente peatonal del espacio, y derivó en cambios
en el proyecto para ampliar el itinerario peatonal hasta los siete metros y
colocar una valla de protección para que los residentes puedan caminar con
seguridad.
Para Francisco Guarido se
trata de una obra sencilla y necesaria tras un plan de urbanización “absurdo”,
que dejó los viales sin continuación, como dos “fondos de saco sin salida”, a
pesar de el proyecto si contemplaba la comunicación de esos dos viales de
la parte trasera de La Vaguada. Y aunque reconoció que el primer proyecto
municipal generó polémica, también dejó claro que muchos residentes de la zona
querían hacer esa obra, que “pone valor todas las edificaciones y todos los
servicios que allí hay”, sin olvidar que es suelo municipal y hay que “dar una
solución a un asunto que viene ya contemplado en el propio plan de urbanismo
actual”.
En cuanto a las
intervenciones que se van a ejecutar, el concejal de Obras aseguró que
revitalizarán unos 26.000 metros cuadrados de zonas de esparcimiento en un
radio de 200 metros, un recorrido que también alberga hasta 13 edificios
públicos. Pablo Novo explicó que las obras se dividirán en tres fases. La
primera actuación estará encaminada a la regulación del estacionamiento en esos
dos viales, que a día de hoy no cuentan con ningún tipo de señalización, para
después habilitar ese parking para un centenar de plazas, mediante la
eliminación de los dos “fondos de saco laterales”.
En este punto, el concejal
de Obras volvió a desmentir los “bulos” que surgieron cuando se planteó este
proyecto inicialmente, ya que en ningún momento este espacio “va a quedar
consolidado como una gran rotonda”. Al contrario, se va a mantener la
bidireccionalidad en los dos carriles de acceso, como en el propio vial de la
parte trasera, con el fin de garantizar y flexibilizar la movilidad en torno a
estos edificios. Junto a esos trabajos de obra civil, el grueso de las labores
se van a centrar en las marcas de señalización vial, que van a configurar todas
estas plazas de estacionamiento, así como el vial de circulación. Y también se
van a instalar los conocidos como bolardos en U, que son “únicamente elementos
para proteger las farolas que se van instalar de posibles golpes de los
vehículos”, matizó Novo.
Por último, el proyecto
incluye una última fase para la creación o la consolidación de ese espacio
estrictamente peatonal junto al estacionamiento, que aprovecha el bordillo ya
existente para delimitar lo que es la zona de estacionamiento y circulación del
espacio peatonal. Con esa intervención va a quedar configurado un entramado
peatonal de 7 metros de longitud y más de 1.000 metros cuadrados de superficie.
En dicho entorno se va a aplicar antideslizante en colores rojo y verde, que
simula los colores de la Seña Bermeja, lo que va a ayudar a visibilizar y a
diferenciar el espacio peatonal de la zona de tráfico rodado.
Pablo Novo insistió en que, tal y como solicitaron los vecinos, se instalará una valla de seguridad en esos 140 metros aproximadamente de longitud del espacio peatonal, a excepción de tres puntos concretos para facilitar el acceso a las personas con movilidad reducida. También se van a aprovechar los trabajos para instalar cuatro bancos de polietileno de colores y dos jardineras del mismo material.