Senderismo en los
Arribes del Duero
Mirador de las
Barrancas
La penillanura ondulada se precipita sobre el gran Cañón
del Río Duero, hogar de las grandes aves que instalan aquí sus nidos: buitres
leonados, alimoches, cigüeñas negras y águilas perdiceras; y de las plantas que
disfrutan de su clima suave: enebros, arces, cornicabras y olivillas. Las
espectaculares formaciones geológicas de los arribes muestran cómo los
cimientos de la Península Ibérica fueron labrados durante miles de años por la
fuerza erosiva del agua.
Datos
técnicos
Inicio: Ermita del Castillo en Fariza
Destino: Mirador de las Barrancas. Vuelta a la Ermita del Castillo
Nivel técnico: Fácil
Nivel físico: Fácil
Duración: 30 min.
Distancia: 1 Km.
Temporada: Todo el año
Varios: Interés etnográfico y paisajístico
Descripción
Ermita del Castillo – Mirador de las Barrancas – Ermita
del Castillo
En las inmediaciones de la Ermita del Castillo, en
Fariza, se halla el Sendero Circular del Castillo, un pequeño recorrido de cien
metros accesible para personas con discapacidad que dispone de paneles
interpretativos sobre los arribes y la vida de sus pobladores. Desde aquí parte
un corto sendero que nos conduce, entre fincas de labor y afloramientos
rocosos, hasta el impresionante Mirador de las Barrancas, sin duda uno de los
más bellos miradores sobre los arribes del Río Duero.
Las vistas sobre los inaccesibles cortados y sobre las pequeñas cascadas del Arroyo Pisón precipitándose en el Río Duero, junto con el extenso bosque de enebros de Cozcurrita, hacen del Mirador de las Barranca un lugar de ineludible visita.